Aniversario del fallecimiento de Eva Duarte de Perón
Eva Perón, la Mujer del Bicentenario
Dijo la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner en ocasión de haber nombrado a Eva Perón Mujer del Bicentenario: "Hablar de Eva es hablar de la historia de la mujer en la política, es hablar de un sujeto nuevo, no solamente desde el género, porque ella fue la verdadera creadora del concepto de justicia social. Ella fue una gran reparadora social, porque ella misma había sufrido discriminación cuando era chica. Además, era mujer, artista y pobre, no le faltaba nada para ser discriminada en la Argentina de aquellos años".
Mujer, artista, pobre
Nació el 7 de mayo de 1919 en la estancia “La Unión”, a pocos kilómetros del pueblo Los Toldos, provincia de Buenos Aires. Hija de Juana Ibarguren y Juan Duarte. Sus hermanos: Blanca, Elisa, Juan y Erminda. En 1930 la familia se traslada a Junín, donde Eva finaliza sus estudios primarios. La casa en la que vivió todavía existe y está en la calle Roque Vázquez 86. En Junín fue donde por primera vez actuó en una obra teatral llamada “Arriba estudiantes”.
A los 15 años, bajo la tutoría del cantante y actor Agustín Magaldi, llegó a Buenos Aires buscando trabajo como actriz. Se hizo famosa en Radio El Mundo y especialmente popular en la serie Grandes mujeres de todos los tiempos.
En el año 1944 conoció a Juan Domingo Perón en un festival a beneficio de las víctimas de un terremoto de San Juan. El 22 de octubre del mismo año se casaron en Junín y dos días después se realizó la ceremonia religiosa en la Iglesia San Francisco, en La Plata.
Su carrera política comenzó con la gran campaña política llevada a cabo a través de su programa de radio semanal, con discursos fuertes, enfatizando su preferencia por la clase trabajadora. Eran las elecciones presidenciales de 1946 y Perón salió triunfante. Inmediatamente Evita tomó un poder importante en el gobierno de Perón creando la Fundación Eva Perón. Desde allí impulsó la creación de hospitales, asilos, escuelas, atendiendo las asignaturas pendientes del estado para con la clase trabajadora y los más pobres de la sociedad.
El eje principal de su popularidad fue constituido en torno a los sindicatos y a su facilidad y carisma para conectarse con las masas trabajadoras, a quienes ella llamaba sus "descamisados". Responsable del voto femenino, participó activamente en la sanción de este a través de la Ley 13010. Impulsó la participación de las mujeres en política y creó el Partido Peronista Femenino. En 1951 fue postulada como vicepresidenta para lo que sería el segundo mandato presidencial de Perón. Si bien contaba con el apoyo total de su partido político y la Confederación General del Trabajo, debió renunciar bajo la presión de la corporación militar en un acto multitudinario en la avenida 9 de Julio “renuncio a los honores, pero no a la lucha”. La acción política dirigida a la mujer cosechó sus frutos en las elecciones del 11 de noviembre de 1951, segunda presidencia de Perón.
¡Nuestra líder espiritual ha muerto! La muerte de Eva Perón
El 26 de julio de 1952 murió a los 33 años, debido a un cáncer uterino. Su cuerpo fue embalsamado y mantenido en exposición en el edificio de la CGT hasta que un golpe militar eyectó a Perón del poder en el año 1955. Luego, el cuerpo fue robado y enterrado en Italia. Con posterioridad, es regresado a Buenos Aires y expuesto por un breve período. Paralelamente, Perón regresó del exilio en 1972 y un año después fue electo presidente. Mientras tanto, Eva es enterrada por tercera vez en el panteón de la familia Duarte en el Cementerio de la Recoleta, Buenos Aires donde actualmente descansa.
Cristina Fernández de Kirchner: “(…) Y hoy estamos homenajeando a una mujer que sufrió no solamente escarnios en vida sino también el escarnio luego de muerta, su cadáver fue el primero que estuvo desaparecido durante años. Si uno pudiera cronológicamente mirarlo diríamos que la primera desaparecida durante 18 años fue ella hasta que luego se decidieron a devolver su cuerpo, pero lo cierto es que fue la primera desaparecida. Y como todos los que han querido hacer desaparecer -dice esa maravillosa canción de Teresa Parodi- no están desaparecidos porque es imposible hacer desaparecer la historia (…)”.
La mujer, su voto y el Partido Peronista Femenino
Las mujeres en la Argentina estuvieron marginadas de la política hasta la llegada del peronismo, donde no sólo obtuvo derecho a votar sino también que cobró protagonismo político como actor del nuevo escenario que se dio en el país, sobre todo en el peronismo donde el partido Peronista Femenino impulsó el nuevo rol que la mujer iría a jugar en política de la mano de Eva Perón.
A su regreso de Europa, Eva retomó sus actividades a pleno. Antes de la partida había comenzado a bregar por la obtención del sufragio para las mujeres.
Desde la Secretaria de Trabajo y Previsión, el coronel Perón encaró una política dirigida a las mujeres. En ese ámbito creó la División de Trabajo y Asistencia a la Mujer. Se reflotó la cuestión del sufragio femenino. El 26 de julio de 1945, en un acto celebrado en el Congreso, Perón explicitó su apoyo a la iniciativa. Se formó entonces la Comisión Pro Sufragio Femenino, que elevó un petitorio al gobierno solicitando el cumplimiento de las Actas de Chapultepec, por las cuales los países firmantes que aún no habían otorgado el voto a la mujer se comprometían a hacerlo.
El 3 de setiembre de 1945 la Asamblea Nacional de Mujeres, presidida por Victoria Ocampo, resolvió rechazar el voto otorgado por un gobierno de facto y reclamó que el gobierno fuera asumido por la Corte Suprema. El lema de la Asamblea era: "Sufragio femenino pero sancionado por un Congreso elegido en comicios honestos". Los sucesos de octubre del 45 pospusieron el tema. La campaña electoral de 1946 puso en evidencia que, ya fuera con el apoyo del laborismo o con el de la Unión Democrática, la mujer, aún sin derechos políticos, había ingresado en la política argentina. Faltaba la legitimación.
Una vez en la presidencia, Perón volvió sobre la cuestión del sufragio femenino. Lo hizo en su Primer Mensaje al Congreso, el 26 de julio de 1946 y en el Plan Quinquenal.
En este marco, Eva emprendió la campaña desde distintos lugares: con los legisladores, con las delegaciones que la visitaban, con las mujeres nucleadas en los centros cívicos, a través de la radio y de la prensa... El mensaje de Eva iba dirigido a un conglomerado femenino extenso, se instaló en las mujeres y ellas pasaron a desempeñar un papel activo: se realizaron mitines, se publicaron manifiestos y grupos de obreras salieron a las calles a pegar carteles en reclamo por la ley. Centros e instituciones femeninas emitieron declaraciones de adhesión. Las mujeres reconocían en Eva Perón a su portavoz. Y el 23 de setiembre, en medio de un gigantesco acto cívico en Plaza de Mayo, se promulgó la ley.
Eva Perón: “Mujeres de mi patria: recibo en este instante de manos del gobierno de la Nación la ley que consagra nuestros derechos cívicos. Y la recibo entre vosotras con la certeza de que lo hago en nombre y representación de todas las mujeres argentinas, sintiendo jubilosamente que me tiemblan las manos al contacto del laurel que proclama la victoria. Aquí está, hermanas mías, resumida en la letra apretada de pocos artículos, una historia larga de luchas, tropiezos y esperanzas. Por eso hay en ella crispación de indignación, sombra de ataques amenazadores, pero también alegre despertar de auroras triunfales. Y eso último se traduce en la victoria de la mujer sobre las incomprensiones, las negaciones y los intereses creados de las castas repudiadas por nuestro despertar nacional”.
La sanción de la Ley 13010 implicó la realización de una serie de tareas que hacían a su efectivización. Si el camino para la obtención del derecho había sido arduo, el de la capacitación cívica y el de la preparación de las mujeres para desempeñarse en las lides políticas lo sería aún más. En este último sentido, el 14 de setiembre de 1947 el Consejo Superior del Partido Peronista resolvió modificar sus reglamentos de afiliación, lo cual permitiría, en el futuro, la formación de otro partido peronista, exclusivamente femenino.
Este hecho se concretó el 25 de julio de 1949. En el Teatro Nacional Cervantes se llevó a cabo la Primera Asamblea Nacional del Movimiento Peronista Femenino. Allí nació el Partido Peronista Femenino, cuyo principio fundamental era la unidad en torno a la doctrina y la persona de Perón. Eva fue elegida Presidenta con plenos poderes de organización. Las unidades básicas del Partido Peronista Femenino desarrollaron, a la par de la tarea de adoctrinamiento (fueron bastiones en la campaña presidencial de 1951), tareas de acción social.
La acción política dirigida a la mujer cosechó sus frutos en las elecciones del 11 de noviembre de 1951. Votaron 3.816.654 mujeres. El 63,9% lo hizo por el Partido Peronista, el 30,8% por la Unión Cívica Radical. A su vez, el Partido Peronista fue el único de ambos que llevó mujeres en sus listas. En 1952; 23 diputadas y 6 senadoras ocuparon sus bancas.
DIPUTADAS NACIONALES: Delia D. de Parodi; Juana Alicia Espejo; Dora Matilde Gaeta y Ana Carmen Macri. (Capital Federal); María Elena Casuccio; Celina Rodríguez; Magdalena Álvarez; Carmen Salaber; Francisca Ana Flores y Zulema Pracánico (Buenos Aires); Judith Elena Acuña y Angélica Dacunda (Corrientes); Isabel Antonia Torterola; Josefa Dominga Brifada y Josefa Bioldi (Santa Fe); María Carmen Caviglia (Entre Ríos); Celia Argumedo (Mendoza); Urbelina Tejada (San Juan); Otilia Villa Maciel (Tucumán); Mafalda Pirovano; Dominga Isadora Ortiz (Santiago del Estero); Seferina del Carmen Rodríguez de Copa; Generosa Domitila Aguilar (Salta).
SENADORAS NACIONALES: María Rosa Calviño (Capital Federal); Ilda Leonor Pineda (Buenos Aires); Elvira Rodríguez Leonardi de Rosales (Córdoba); Elena Di Girolamo (Corrientes); Juana Larrauri (Entre Ríos) y Nélida Castaleira (Santa Fe).
La Ley 13010
Equiparar a mujeres y hombres en sus derechos políticos suena tan simple como el articulado de la ley 13010, pero la lucha para llegar a esa igualdad jurídico fue ardua y no sin obstáculos culturales.
Artículo 1°- Las mujeres argentinas tendrán los mismos derechos políticos y estarán sujetas a las mismas obligaciones que les acuerdan o imponen las leyes a los varones argentinos.
Artículo 2°- Las mujeres extranjeras residentes en el país tendrán los mismos derechos políticos y estarán sujetas a las mismas obligaciones que les acuerdan o les imponen las leyes a los varones extranjeros, en caso que éstos tuvieren tales derechos políticos.
Artículo 3°- Para la mujer regirá la misma ley electoral que para el hombre, debiéndosele como un documento de identidad indispensable para todos los actos civiles y electorales.
Artículo 4°- El Poder Ejecutivo, dentro de los 18 meses de la promulgación de la presente ley, procederá a empadronar, confeccionar e imprimir el padrón electoral femenino de la Nación, en la misma forma en que se ha hecho el padrón de varones. El Poder Ejecutivo podrá ampliar ese plazo en seis meses.
Artículo 5°- No se aplicarán a las mujeres las disposiciones ni las sanciones de carácter militar contenidas en la ley 11.386. La mujer que no cumpla con la obligación de enrolarse en los plazos establecidos estará sujeta a una multa de cincuenta pesos moneda nacional o a la pena de quince días de arresto en su domicilio, sin perjuicio de su inscripción en el registro respectivo.
Artículo 6°- El gasto que ocasione el cumplimiento de la presente ley se hará de rentas generales, con imputación a la misma.
Artículo 7°- De forma.
Cristina Fernández de Kirchner: “(…) Creo humildemente que en estos años que han pasado y durante este período de la primera Presidenta mujer de la historia -tal vez ella tenía que haber sido porque lo hubiera merecido- hemos tratado de hacer honor a ese compromiso que siempre tuvimos con nuestras ideas, con nuestras convicciones, que eran las de ella y que seguirán siendo siempre las de ella, Eva, la mujer de Bicentenario”.
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